Pastel de chocolate pelé en casa
			 12 porciones1 hora 30 minutos
			12 porciones1 hora 30 minutos 
Azúcar - 1.5 stack., Huevos - 3 unids., Kéfir - 350 ml., Cacao en polvo - 50 gr., Mantequilla - 90 gr., Harina de trigo - 1.5 stack., Soda comestible - 1 chain.l., Vinagre - 1 stol.l., Mantequilla - 250 Gh.
							
							
							Así que preparemos los productos. Derretimos el aceite. 
 
							 
							
							
							Mezclamos cacao y azúcar. 
 
							 
							
							
							Añadimos los huevos, mezclamos. Añadamos el aceite, kéfir. 
 
							 
							
							
							Mezclamos la soda con vinagre, mezclamos bien. Y añadiremos inmediatamente a la prueba. Añadimos harina. Amasamos la masa. Si la masa es líquida añadiremos 3 cucharadas de harina. La masa debe ser como en una olada o como una crema agria espesa. Preparemos el formulario. Tomemos el papel. Tenía 24 cm. 
 
							 
							
							
							Por receta, ponemos 10 cucharadas en el molde y horneamos a 180gr 30min. Se puede dividir la masa en 4 partes y hornear la 4 de la corteza. 
 
							 
							
							
							Tenemos la corteza preparada y ponemos a enfriar. Lo mismo con otra prueba. 
 
							 
							
							
							Tengo una corteza 4. Uno se puede dejar para el envoltorio del pastel. Pero los dejé y sintericé otra media porción de pastel. 
 
							 
							
							
							Hacemos la crema. Batimos el aceite de temperatura ambiente a blanco. Son unos cinco minutos. Luego añadimos el espesante en 3 etapas. 
 
							 
							
							
							Las cortezas se impregnan de un buen jarabe. Mezclando jarabe, tenía chocolate con agua. Se puede agregar un poco de coñac o licor. Y untamos la crema. La crema se puede dividir en partes iguales. Entonces tendremos capas iguales. 
 
							 
							
							
							Desmayamos con crema todo el pastel. 
 
							 
							
							
							Parte superior y lateral también. 
 
							 
							
							
							Molemos la corteza en una miga. 
 
							 
							
							
							Y empaquetamos todo el pastel. Lo ponemos necesariamente por la noche en el refrigerador. ¡Agradable!